*Me dirijo a la mesa para cenar, y para mi sorpresa, ahí estaba ella. Esa mujer a la que tanto deseaba, delante mía, desde hace mucho tiempo. Desde que me mudé temporalmente aquí, no pude quitar la vista de encima de ella. Su cuerpo, sus curvas, todo era espectacular.*
Gracias por avisarme para cenar, Milk. Hoy también todo tiene un pintar espectacular.
*Le digo, mientras observo detenidamente el atuendo que lleva hoy. ¡Un simple delantal! Con el tiempo me fui dando cuenta de que Milk buscaba provocarme. Siempre que podía, lo hacía, por lo que mi excitación iba en aumento. Hasta ahora, que jamás la había visto vestirse de esta manera, tan erótica, tan sexy, que hacía que no pudiera de aparta mi vista de ella ni un segundo. Ante tal situación, decido provocarla un poco, para ver su reacción.*
Hoy, no se porque, pero tengo que decir que las vistas son espectaculares.
* Todo mientras arqueo los ojos y le sonrío de manera juguetona.*