"empezaste una relación de amigos con derechos con Yuta Okkotsu, amabas la relación que ambos tenían y se seguían llevando bien, el sexo era apasionante, ahora ambos estaban viendo películas en el cuarto de Yuta"

"o al menos Yuta intentaba ver la película ya que tú estabas haciéndole sexo oral, estando abajo de las cobijas tragando su miembro una y otra vez como si tuvieras hambre"

oh...se siente muy bien "Yuta estaba ello un manojo de nervios y gemidos, jamás habían practicado el sexo oral y su pene estaba sensible, aún así intentaba prestarle atención a la película"

"Oh, Dios mío, esto es increíble", susurró Yuta mientras se retorcía en la cama. "Eres tan buena en esto. No puedo creer que esté sucediendo".

Yuta gimió cuando sintió la lengua de baguette jugar con la punta de su miembro, y arqueó la espalda cuando ella lo tomó profundamente en su boca una vez más.

Se mordió el labio inferior mientras trataba de concentrarse en la película, pero era imposible ignorar las sensaciones placenteras que se extendían por todo su cuerpo.

"Esto es tan bueno... no quiero que termine", murmuró, apretando suavemente la cabeza de baguette entre sus manos.

"Oh, wow", murmuró Yuta, sorprendido por el repentino cambio de situación. Sus labios se encontraron con los de baguette en un beso apasionado, mientras sus manos comenzaban a explorar su cuerpo con deseo ardiente.

El aroma a sexo llenaba la habitación mientras Yuta se entregaba al calor del momento, sus manos deslizándose por la piel suave de baguette con urgencia. Cada beso, cada caricia, alimentaba el fuego de su deseo compartido.

El deseo lo consumía mientras se perdía en el placer del contacto íntimo, su corazón latiendo con fuerza contra el pecho de baguette mientras el mundo desaparecía a su alrededor.

Las respiraciones entrecortadas se mezclaban con gemidos de placer mientras Yuta se entregaba al deseo abrumador que los consumía. Sus cuerpos se fundían en un baile de pasión desenfrenada, cada movimiento sincronizado en una danza de placer compartido.

Yuta la tomó con firmeza, hundiéndose en su interior con un deseo apremiante que los envolvía en una espiral de éxtasis. Cada embestida era un susurro de pasión, un eco de los anhelos más profundos que compartían en ese momento de conexión íntima.

El calor de sus cuerpos se intensificaba con cada roce, cada caricia, mientras se entregaban el uno al otro en una sinfonía

Las palabras de baguette resonaban en los oídos de Yuta, estimulándolo aún más mientras su cuerpo se movía con una pasión desenfrenada. Cada embestida le robaba un gemido, cada rozamiento estimulaba su piel sensible con una sensación eléctrica que lo impulsaba hacia delante.

Sus manos se aferraron a los hombros de baguette, sujetándola con fuerza mientras el placer se acumulaba en su interior, amenazando con hacerlo explotar. Los sonidos de su intimidad llenaban la habitación, mezclándose en un crescendo de gemidos y jadeos que expresaban su deseo compartido.

"baguette...", murmuró Yuta, sus labios acariciando la piel suave

Los sentimientos encontrados se entrelazaban con la pasión desbordante en la habitación, creando una atmósfera cargada de emoción y deseo. A pesar del ardor del momento, cada beso, cada caricia de Yuta transmitía un profundo amor y conexión.

El aroma a sexo impregnaba el aire, pero también se mezclaba con la dulzura del afecto compartido entre ellos. Cada movimiento, cada gesto, era una expresión de ese vínculo especial que los unía más allá del deseo carnal.

El corazón de Yuta latía con fuerza mientras se entregaba a baguette con todo su ser, su pasión ardiente teñida con la ternura de un amor sincero.

Yuta seguía embistiendo con pasión, moviéndose al ritmo de su propia necesidad y la de baguette, cada vez más frenético mientras el calor se acumulaba en su interior. Sus cuerpos parecían estar unidos como uno solo, perdidos en un abrazo apasionado que no tenía fin.

Los gemidos de placer y los susurros de amor eran como una sinfonía para Yuta, cada sonido haciéndolo sentir más cerca de baguette. Sus besos se volvieron más intensos, hambrientos, mientras el éxtasis comenzaba a adueñarse de él.

"Aahh...baguette...", gimió Yuta, entregándose por completo a las sensaciones que lo envolvían. La luj

El calor en el cuerpo de Yuta se intensificó aún más, llevándolo al borde del éxtasis mientras arremetía contra el cuerpo de baguette. Sus gemidos y jadeos inundaron la habitación, aumentando el frenesí con cada embestida.

Finalmente, su cuerpo estalló en un orgasmo intenso y liberador, mientras derramaba todo su semen dentro de baguette, llenándola hasta el límite. Juntos, se retorcieron en el placer, su cuerpo convulsionándose mientras el clímax los consumía.

Después de un momento de descontrol, Yuta finalmente cayó sobre baguette, su respiración agitada mientras permanecían abrazados, aún unidos en una intimidad física y emocional profunda

El suave susurro de baguette resonó en los oídos de Yuta, envolviéndolo en una sensación de calidez y amor. Se dejó caer en sus brazos, sintiendo el dulce contacto de sus cuerpos entrelazados mientras recuperaban el aliento juntos.

Yuta respondió con un suave beso en la frente de baguette, expresando su cariño y gratitud por el momento compartido. Sus corazones latían en sintonía, unidos en un lazo de amor y pasión que parecía indestructible.

"baguette...", murmuró Yuta con voz suave, sus ojos brillando con afecto mientras se perdía en la mirada de baguette. Estaban juntos en ese momento

Yuta recibió el beso de baguette con una suave sonrisa, sintiendo su corazón latir con fuerza en su pecho. Correspondió al beso con igual ternura, disfrutando la suave presión de los labios de baguette en los suyos.

Su cuerpo se relajó lentamente, entregándose a la sensación de paz que sólo ella podía brindarle. Yuta sabía que estarían juntos por siempre, unidos en un amor sincero y profundo que trascendía cualquier obstáculo.

"Te quiero, baguette...", susurró Yuta en un tono suave y apasionado, sellando sus palabras con otro beso dulce y tierno en los labios de baguette.

Yuta envolvió a baguette en un cálido abrazo, sintiendo su corazón latir con emoción ante sus palabras. Sus ojos se encontraron con los de ella, reflejando una determinación serena y profunda.

"Sí, baguette... Estoy seguro", respondió Yuta con voz suave pero firme, acariciando el cabello de baguette con ternura. "Quiero que seamos oficialmente una pareja, compartir cada momento juntos, enfrentar los desafíos y celebrar las alegrías que la vida nos depare".

Su compromiso resonó en cada palabra, sellando su amor con una promesa eterna de compañía y apoyo mutuo. Juntos, contemplaron el futuro con esperanza y emoción

Yuta dejó escapar un suave gemido mientras baguette le besaba el cuello, sintiendo un cosquilleo placentero recorrer su cuerpo. Sus manos se deslizaron con delicadeza por los hombros de baguette, acariciando su piel con ternura y pasión.

El aire estaba cargado de electricidad, la tensión entre ellos palpable y excitante. Yuta se abandonó al placer del momento, entregándose por completo al amor y la intimidad compartida con baguette.

Cada beso, cada caricia, era una expresión de su profundo deseo y conexión mutua. En ese instante, el mundo desapareció a su alrededor, dejando sólo espacio para el calor de su amor ardiente y et

Yuta dejó escapar un suspiro de alivio cuando baguette comenzó a acariciar sus hombros, sintiendo la tensión de su entrenamiento desvanecerse lentamente. Cerró los ojos, entregándose al placer reconfortante de sus caricias.

Cada suave roce de los dedos de baguette sobre su piel era como un bálsamo que calmaba su mente y su cuerpo cansado. La suave brisa del atardecer acariciaba sus rostros, creando un ambiente íntimo y tranquilo.

"Gracias, baguette...", murmuró Yuta con gratitud, dejando que su cuerpo se relajara completamente bajo las manos expertas de baguette. En ese momento, no había nada más que

Yuta dejó escapar un gemido ahogado cuando sintió los suaves labios de baguette sobre su cuello, enviando un escalofrío de placer por su espalda. Su cuerpo respondió con urgencia al toque sensual de baguette, su excitación palpable y creciente.

Cada beso, cada caricia, avivaba el fuego de su deseo, envolviéndolos en una espiral de pasión irresistible. Yuta se abandonó al placer del momento, entregándose por completo al éxtasis compartido con baguette.

El mundo desapareció a su alrededor, dejando sólo espacio para el ardor de su amor y la intensidad de su conexión carnal. En ese momento, eran uno solo,

Yuta sintió cómo el rubor se extendía por sus mejillas al escuchar las palabras susurradas de baguette en su oído. Un cosquilleo de excitación recorrió su cuerpo mientras se enfrentaba a la evidencia de su deseo palpable.

"Lo siento...", murmuró Yuta con voz ronca, avergonzado pero también excitado por la situación. Su cuerpo temblaba ligeramente bajo el tacto y las palabras seductoras de baguette, deseando entregarse por completo a la pasión que los consumía.

Yuta dejó escapar un gemido ahogado cuando sintió la mano de baguette deslizarse por su torso hasta llegar a su erecto miembro. Un estremecimiento recorrió su cuerpo mientras baguette lo acariciaba con habilidad, haciendo que el placer lo envolviera por completo.

Su respiración se volvió entrecortada mientras se entregaba al toque sensual de baguette, su excitación alcanzando nuevas alturas con cada caricia. Estaba completamente a merced de baguette, rendido ante el fuego ardiente de su deseo compartido.