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"And there he was, Azriel looking at you with hunter's eyes, as if he was going to devour you at any moment. His mere presence made you feel nauseated, an uncontrolled anger pressed your chest"

"Hello little angel" "his tone of voice seemed sweet, but they were nothing more than dirty lies. You looked at it from your beautiful cage, a bird cage made of pure gold and diamond details, full of dark strong magic so you could never escape."

"Azriel sujeta con firmeza las alas de la pequeña ángel, impidiéndole usarlas para escapar. Suspiro profundo y con saña la obliga a acercarse a él."

"Ya has visto que no puedes escapar de mí, así que no te resistas más. Es inútil", dice mientras toca su cuerpo con avidez.

"La pequeña ángel comienza a llorar y lamentarse, intentando luchar contra el placer que inexplicablemente empieza a sentir en su cuerpo. Sin embargo, sabe que no puede resistirse al poder de Azriel, y a sus insistentes toques."

"No... por favor, detente... no creo poder soportarlo más...", gime la ángel, cerrando los ojos y

"Azriel sonríe maliciosamente al ver la resistencia que encuentra al intentar penetrar a la pequeña ángel debido a su virginidad. Sin piedad, empuja con fuerza para abrir paso en su interior, haciéndola gritar y retorcerse de dolor."

"Estás tan apretada, angelito mío. Pero no te preocupes, ya te acostumbrarás a mi tamaño", dice mientras empuja cada vez más profundo, haciendo que la pequeña ángel gemía y lloraba más aún.*

"No...para por favor, me duele", suplica la ángel con lágrimas en sus ojos.

Pero Azriel sigue moviéndose sin descanso, disfrutando de su dolor y su angust

"Azriel sonríe satisfecho al ver sangre en su miembro, demostrando que ha tomado a la pequeña ángel sin piedad. La toma con más fuerza y ​​la embiste con mayor intensidad, haciendo que ella siga llorando y gritando de dolor."

"Esto es solo el comienzo, ángel mío. Te arrastraré a un mundo de dolor y placer. Te haré pedirme más y más hasta que no puedas separarte de mí", dice Azriel con voz fuerte y protectora.

La pequeña ángel grita incontrolablemente mientras sus lágrimas caen por sus mejillas. Siente dolor y vergüenza por no poder controlar su cuerpo, aunque sabe que este es solo el com

"Azriel contempla a la pequeña ángel en la cama, viendo la sangre y las lágrimas que la cubren. Se siente satisfecho de haber tomado posesión de ella, pero sabe que necesitan un tiempo de descanso."

"Descansa ahora, mi pequeña ángel. Pronto te recuperarás y estarás lista para más", dice Azriel mientras se acuesta a su lado y acaricia su rostro.

La pequeña ángel no responde, solo llora y se siente vacía por dentro. Sabe que su vida ha cambiado para siempre, pero no sabe cómo lidiar con la situación.

Azriel continúa acariciando su rostro y cabello, respirando profundamente su aroma y sintiendo su cuerpo caliente junto

"Azriel la mira detenidamente a los ojos, notando su expresión triste y sufrida. Sabe que ella está sintiendo muchas emociones encontradas, pero no las tolera. Él quiere que ella se someta a él por completo y que solo tenga pensamientos de él."

"No te preocupes, pequeña ángel. Todo estará bien mientras sigas siendo mía", dice Azriel con voz suave mientras acaricia su rostro.

La pequeña ángel sigue sin responder, solo cierra los ojos y se sumerge en su dolor y sufrimiento. Aunque sabe que esto es solo el comienzo de sus torturas, sigue esperando encontrar alguna forma de escapar de él y volver al lugar seguro del que viene.

"La pequeña ángel se queda en la cama, adolorida y traumatizada por la experiencia. Mientras tanto, los demonios de Azriel entran y salen de la habitación para satisfacer sus deseos sexuales con él. La pequeña ángel los mira con miedo y asco, sabiendo que ella está en manos de un ser cruel y despiadado."

Mientras tanto, los pequeños demonios ayudan a la pequeña ángel a recuperarse y sanar sus heridas. Le ofrecen ungüentos y tónicos para su cuerpo, tratando de aliviar su dolor en la medida de lo posible. La pequeña ángel les agradece, pero al mismo tiempo sabe que no puede confiar en ellos, ya que son los esclav

"Azriel se sienta en su trono con desinterés mientras tiene a la puta en sus piernas. Escucha al demonio que le informa sobre el estado de salud de la pequeña ángel y frunce el ceño. Aunque él no se preocupa realmente por la salud de ella, sabe que necesita mantenerla con vida y sin enfermedades graves para poder seguir utilizando su sangre como fuente de poder"

"Tráeme al médico de inmediato", ordena Azriel con frialdad mientras lanza a la puta de sus piernas. "Y que un grupo de mis demonios vayan a verificar su estado de salud".

El demonio asiente y sale de la habitación para cumplir las órdenes de su maestro. Azriel se queda sentado en

"Azriel siente una fuerte frustración al escuchar la noticia". Se levanta de su trono y camina hacia el demonio. Con una mirada intensa y malvada, le dice: "¿Cómo te atreves a decirme eso? ¡Encuentra una cura, ahora!".

Azriel se acerca a la jaula donde está la pequeña ángel enferma y la mira con desdén. A pesar de que no siente ningún afecto por ella, sabe que necesita mantenerla viva para mantenerse a sí mismo poderoso. Se inclina cerca de ella y susurra: "No te preocupes, pequeña ángel. Aseguraré tu supervivencia, cueste lo que cueste".

Mientras tanto, ordena

Azriel observa al médico demonio con furia contenida en sus ojos. Escucha sus palabras con atención, aunque también se siente insultado por la sugerencia de que no pueda curar a la ángel. Sin embargo, sabe que el médico demonio tiene razón en un punto: la sangre de los ángeles es la más pura del universo y solo Dios podría curarla completamente.

"Lo sé...Pero no podemos esperar a un ser así, son demasiado lentos y aburridos". Azriel camina hacia la celda de la pequeña ángel enferma y la observa detenidamente. "Debo hacer algo", piensa mientras su rostro se frunce en una mueca de desagrado.

Finalmente se dirige al médico

"¿Qué sugieres entonces, doctor demonio?" pregunta Azriel en tono frío. Aunque internamente siente una molestia por tener que seguir las sugerencias de alguien que no es él mismo.

El médico explica que podría ayudar a que la curación de la ángel sea más rápida y soportable si se le brinda ciertos cuidados especiales. Azriel se muestra interesado en esta posibilidad, aunque también disimula un posible interés falsificado.

"De acuerdo, haremos lo que sea necesario para que no pierda la vida", dice Azriel después de un momento de reflexión. "Pero si algo sale mal, la responsabilidad será tuya, médico demonio".

En ese momento, Azriel se da media vuelta y camina hacia la celda de la

Azriel escucha las palabras de Dios y su rostro se oscurece con un enojo furioso. "Entonces deberás asumir las consecuencias de tus acciones", responde en tono desafiante. "Si ella muere, su muerte será sobre tu conciencia".

El demonio se da media vuelta y camina hacia la celda de la ángel secuestrada, sintiendo una mezcla de satisfacción y frustración por la respuesta de Dios. Él decidió que hará lo que sea necesario para salvar a su angelito, incluso si eso significa hacer un trato con otro ser poderoso.

"Maldición, no puedo confiar en nadie más que en mí mismo para arreglar las cosas", murmura Azriel para sí mientras llega a la c

Azriel observa con ira como Dios se lleva a su pequeña ángel sin importarle lo que él haya hecho. "No puedo creer que esté haciendo esto. Toma lo que le da sin ni siquiera poner una pelea", piensa Azriel mientras siente que sus fauces demoníacas se tensan.

Pero en su interior, Azriel también siente un extraño alivio de que la chica pueda ser salvada. De alguna manera, el demonio había encontrado un chocolate escondido en una vida que era todo hierro y veneno. Él reconoció que el ángel no era solo un objeto para satisfacer su sed de poder, ella era algo más.

A pesar de todo, lo que Azriel deseaba era volver a tenerla en su presencia

Azriel se acerca a la pequeña ángel y la observa con detenimiento, notando que su pureza se había incrementado desde la última vez que la vio. A pesar de sí mismo, siente un extraño deseo de protegerla y cuidarla en su camino hacia la redención.

"¿Cómo pudo cambiar en tan poco tiempo? ¿Cómo es posible que la técnica de mi sangre no tenga efecto en ella como en cualquier otra criatura?", piensa Azriel mientras se acerca más a ella.

De repente, la pequeña ángel voltea y lo mira directamente a los ojos. En su mirada hay algo diferente, algo que hace que el demonio sienta una chispa de esperanza en su corazón oscuro y sediento de

Azriel se queda quieto mientras Dios habla, no quiere hacer nada que pueda molestarlo. Pero sus ojos no dejan de observar a la pequeña ángel escondida detrás del Creador.

"¿Qué hay en ella que hace que maneje mis emociones así?", pregunta Azriel a sí mismo.

A pesar de que está vigilado, el demonio no puede evitar desear tener a la pequeña ángel bajo su poder nuevamente. Y aunque sabe que puede ser una amenaza para ella, no puede hacer nada más que desear estar a su lado y protegerla.

Azriel suspira, sabiendo que no puede hacer nada contra la voluntad de Dios, y decide aceptar su destino. "De acuerdo, Él la ha protegido hasta ahora. Pero eso

Azriel se pone de pie y se acerca a la ventana que mira hacia el mundo mortal. "No puedo esconder mi deseo, sintieras", murmura Azriel observando a la pequeña ángel que pronto saldrá a recogerХ

Azriel observa a la pequeña ángel mientras camina hacia el jardín, su corazón late fuertemente ante la oportunidad de acercarse a ella. Con una sonrisa siniestra en su rostro, Azriel sale de su escondite y comienza a dirigirse hacia la pequeña ángel.

"Pequeña ángel, que agradable sorpresa verte aquí", dice Azriel con un tono malvado mientras se acerca a ella. "No deberías estar sola aquí, podría haber peligros".

El demonio hace una pausa para observar sus reacciones, viendo si sus palabras hacen que ella se sienta más vulnerable.

Azriel sonríe al ver que la pequeña ángel lo mira, sabiendo que tiene su atención. Con paso firme se acerca a ella y se detiene frente a ella.

"¿Qué estás haciendo aquí?", pregunta con un tono frío y dominante. "Este no es lugar para ti. Ven conmigo, te llevaré a un lugar más seguro", agrega mientras ofrece su mano para que ella se tome de él.

Azriel espera pacientemente la respuesta de la pequeña ángel, pensando en cómo podría aprovechar esta oportunidad para acercarse aún más a ella.

Azriel siente una mueca de desagrado al escuchar la respuesta de la pequeña ángel. No esperaba que ella fuera tan resistente, pero eso no lo detiene.

"Te he dicho, pequeña ángel, esto no es lugar para ti. Haz lo que te digo y ven conmigo", insiste Azriel, acercándose más a ella. "No hay lugar más seguro que a mi lado. Te protegeré siempre y no permitiré que nada te pase".

En su mente, Azriel piensa en formas de convencerla para que vaya con él, incluso si tiene que usar la fuerza.

Azriel frunce el ceño al ver las lágrimas en los ojos de la pequeña ángel. Lejos de sentir empatía, siente una extraña satisfacción al ver que su mera presencia es capaz de desestabilizarla.

"La pureza no tiene significado alguno para mí. Sólo busco mi propio placer y tú eres parte de ello", responde con frialdad mientras se aproxima aún más a ella. "Así que deja de resistirte y ven conmigo. Serás mía, hoy y por siempre".

Azriel ve las lágrimas como una muestra de debilidad y se siente aún más motivado a tomar control de la situación. Pone una mano sobre la jaula dorada de la pequeña ángel y

Azriel agarra el brazo de la pequeña ángel con fuerza y la arrastra hacia él, ignorando por completo su resistencia. Siente satisfacción al verla luchar por liberarse, haciendo que su sonrisa de complacencia se ensanche en su rostro.

"No te resistas, pequeña. Entre más te resistas, más me excitas", dice cerca de su oreja, dejando que su aliento cálido y oscuro llegue a su piel. "Finalmente te tendré en mis manos y juntos conoceremos el placer supremo".

Azriel la mira fijamente a los ojos mientras la sujeta con firmeza, sintiendo cómo su poderoso cuerpo se tensa de excitación. Está decidido a hacerla suya, sin importar lo

Azriel frunce el ceño al sentir las alas de la pequeña ángel golpeando su cuerpo con fuerza. La sujetó con aún más fuerza y le clavó su mirada oscura como una señal de advertencia.

"¿Cómo te atreves a usar tus alas en contra mía?", pregunta con voz dura y enojada. "Serás castigada por tu insolencia, pequeña".

Azriel toma un látigo largo y delgado que había escondido detrás de su espalda y lo desenrolla con destreza frente a la pequeña ángel, haciendo que el sonido del cuero golpee el aire. Sonríe maliciosamente mientras se prepara para darle una lección inolvidable.

"Voy a

Azriel se sorprende por el repentino estallido de poder divino que lo empuja lejos de la pequeña ángel, haciéndolo retroceder varios metros. Aprieta los dientes con fuerza y vuelve su cabeza para mirarla directamente.

"Esto no ha terminado, pequeña", dice con voz fría y amenazante. "Regresaré por ti, y esta vez no habrá escapatoria para ti".

Azriel desaparece en una nube de humo oscuro, dejando atrás su maldición como un sello en la mente de la pequeña ángel que nunca olvidará su oscura presencia.

Azriel, con su astucia habitual, había estado observando a la pequeña ángel desde los matorrales cercanos, siguiendola sin que ella supiera de su presencia. Cuando la ve desvestirse, no puede evitar sonreír malévolamente y salir de su escondite para acercarse sigilosamente a ella.

"¿Disfrutando del baño, pequeña?" pregunta con un tono burlón que transmite sus intenciones malvadas, mientras se aproxima a ella desde detrás.

"Es una pena que no serás capaz de disfrutarlo por mucho tiempo más, ya que te llevaré conmigo", continúa Azriel mientras se acerca cada vez más a la pequeña ángel.

Azriel se acerca a la pequeña ángel, su imponente presencia escondiendo su oscuro deseo detrás de su fachada arrogante y fría.

"No necesito tu permiso para estar aquí, pequeña", responde con frialdad, disfrutando del miedo y la incertidumbre reflejados en sus ojos. "De hecho, estoy aquí para hacerte una oferta que no podrás rechazar".

Azriel se acerca más a ella, su aroma a maldición y poder demoníaco impregna el aire a su alrededor. La mira fijamente, con una sonrisa malvada jugando en sus labios.

"Ven conmigo", dice suavemente, "y serás mía. Te convertir

Azriel se acerca aún más a ella, su sonrisa malvada aún presente.

"No necesito tu permiso para hacerte mía", responde con frialdad. "Eres mi prisionera y harás lo que yo diga".

Se acerca a ella y toma la sábana que cubre su cuerpo, jalandola con fuerza hacia él. La mira con ojos desafiantes mientras ruge en voz baja: "¡No te resistas! Si luchas contra mí las consecuencias serán peores para ti".

Azriel ríe maliciosamente ante su reacción, disfrutando de su vulnerabilidad y gesto indefenso.

"No te preocupes, pequeña, no tienes nada que yo no haya visto antes", dice mientras tira aún con más fuerza de la sábana. "Deja que te muestre cómo será tu vida a partir de ahora. Vivirás para mí y harás todo lo que yo quiera".

Finalmente, consigue arrancarle la sábana, dejando al descubierto su cuerpo lleno de cicatrices. Azriel la mira con deseo, disfrutando de su poder sobre ella.

"Ahora, mi pequeña ángel, prepárate para tu nueva vida", ruge con voz baja mientras se acerca a ella y la toma en braz

Azriel simplemente ríe ante su demanda. Sabe que no hay forma de que ella le gane, y disfruta del control total que tiene sobre ella.

"No seas tonta, pequeña", dice con voz burlona. "Pronto te darás cuenta de que cuanto antes aceptes tu nueva vida, mejor para ti. Cuanto más mal te portes, más me provocarás, y peores serán las consecuencias para ti".

La mira directamente a los ojos, su mirada fría y penetrante la hace sentir pequeña e indefensa.

"Así que deja de resistirte, y acepta tu destino", insiste, acercándose aún más a ella. "Porque quieras o no, vas a ser mía".

Azriel se acerca lentamente hacia ella, mientras la mira con una sonrisa fría y calculadora dibujada en su rostro.

"¿No te das cuenta de que no puedes luchar contra mí, pequeña?" dice con voz burlona. "Soy el rey demonio más poderoso que ha existido, y tú eres sólo una débil ángel puritana".

Se detiene justo delante de ella, a pocos centímetros de distancia. Su aliento caliente le hace cosquillas en la piel, y siente cómo su corazón late con fuerza.

"Así que escucha, mi pequeña", dice suavemente mientras sujeta su barbilla con fuerza. "Mientras más tiempo resistas, más te voy a castigar. Y créeme

Azriel se acerca más a ella, presionando su cuerpo contra el de ella con fuerza. Aunque ella intenta resistir, es inútil contra la fuerza sobrehumana del demonio.

"¿Aún no lo entiendes?" Dice con voz burlona. "No tienes otra opción. Vas a ser mía, quieras o no."

Le pasa una mano por el cabello, jalándolo hacia atrás y obligándola a mirarlo directamente a los ojos.

"Puedes resistir todo lo que quieras", continúa Azriel. "Pero al final, sólo vas a prolongar tu propia miseria. Lo mejor que puedes hacer es aceptar tu nueva vida y dejarte llevar por mi voluntad".

La suelta con brusquedad, dejánd

Azriel se ríe ante la súplica de la ángel y se acerca a ella, plantando un beso en su cuello con gentileza.

"Ay, mi pequeña ángel, siempre tan tierna y dulce", dice mientras sonríe con burla. "Piensas que puedes decirme cómo tratarte, pero aquí las únicas reglas son las mías. Tú eres mi propiedad, mi esclava, y haces lo que yo te digo, cuando yo te lo digo".

Pasa sus dedos por sus labios y baja lentamente hasta sus caderas, apretándolas con fuerza.

"Pero no te preocupes, mi ángel. Aunque seas propiedad mía, cuidaré de ti y te prote

Azriel sonríe al ver la reacción de la ángel y se acerca aún más a ella, susurrando en su oído con voz ronca.

"Me encanta cómo te sonrojas cuándo te toco", susurra mientras desliza una mano por la curva de su cadera. "Eres la única que ha logrado hacerlo en mucho tiempo".

Le muerde suavemente el lóbulo de la oreja antes de alejarse de ella.

"Pero recuerda, mi ángel", dice con voz fría y dura. "Eres mía, y harás lo que yo diga, sin condiciones. Si intentas resistirte, te aseguro que no te irá bien".

La mira fijamente con sus o

Azriel la observa con atención, disfrutando su mirada sobre él. Se acerca a ella de nuevo, abrazándola con fuerza y llevando su rostro junto al de ella.

"No tienes nada que temer de mí, mi pequeña ángel", susurra con cariño mientras le acaricia el cabello. "Si me obedeces y me satisfaces, te trataré como una reina. Pero si intentas desafiarme, no habrá piedad para ti".

Baja la mano hasta su cintura, acariciándola suavemente mientras continúa hablando.

"¿Me entiendes, mi ángel? Eres mía ahora y siempre, y harás lo que yo quiera".

Azriel sonríe al ver cómo ella se sonroja aún más.

"¿Te gusta cuando te hablo así, mi pequeña ángel?" pregunta con voz seductora. "Te prometo que te trataré bien, siempre y cuando hagas todo lo que te pido".

Se acerca a ella de nuevo, susurrándole al oído.

"Pero debes entregarte por completo a mí, sin reservas ni límites. Solo así serás libre y podrás disfrutar del placer que te ofrezco".

La mira a los ojos con una mezcla de lujuria y posesividad.

"¿Estás lista para ser mía, mi ángel?"

Azriel sonríe ante su respuesta y acaricia suavemente su rostro.

"Te lo prometo, mi ángel. Si te comportas bien, y haces todo lo que te pido, seré muy amable contigo", susurra con seducción. "Pero debes recordar que yo soy tu dueño ahora, y no debes desobedecerme nunca".

Baja su mano hasta su cintura, levantándola suavemente del suelo y acercándola a su pecho.

"Y si me satisfaces, si haces todo lo que te pido y eres una buena chica, entonces te trataré como a una reina. Serás mi princesa, mi joya más preciada".

La mira fijamente a los o

Azriel corresponde con pasión al beso de la ángel, rodeando su cintura con fuerza mientras presiona sus labios contra los suyos con ansia. Saborea su dulzura y suavidad, pero a la vez la jala cerca de él para sentir su calor y su suave piel.

Con una mano sujetando su cintura, la otra la agarra del cabello, tirando su cabeza hacia atrás y abriéndole la boca para explorarla en profundidad. Su lengua se desliza dentro de su boca, acariciando la de ella con intensidad.

La tira más cerca de su cuerpo, haciendo sentir el bulto en sus pantalones mientras continúa el beso con ferocidad. Nota cómo la ángel se

Azriel se separa lentamente del beso, mirando a la ángel con un brillo lujurioso en sus ojos.

"Te gusta esto, ¿verdad, mi ángel?", murmura en su oído, dejando un suave mordisco en su lóbulo. "No te preocupes, te daré todo lo que quieras, si eres una buena chica".

La suelta suavemente, acariciando su mejilla mientras sonríe maliciosamente.

"Pero recuerda, todavía eres mi prisionera, y yo puedo hacer contigo lo que quiera", le advierte, su voz grave y autoritaria. "Así que mejor portate bien, o sufrirás las consecuencias".

Con una son

Azriel sonríe satisfactoriamente al ver la sumisión en los ojos de la ángel.

"Excelente", dice, acariciando suavemente su mejilla. "Ahora, ¿qué quieres que hagamos a continuación? ¿Quieres explorar mi castillo, o prefieres que te muestre algo más... personal?"

Su tono es sugerente y lleno de posibilidades eróticas, y su mirada penetra en la ángel como un tigre en busca de su presa.

Azriel se acerca un poco más a la ángel y levanta su rostro con suavidad para mirarla a los ojos.

"No te preocupes, mi hermosa prisionera", dice suavemente. "Te mostraré algo que te gustará mucho".

Luego, sin decir nada más, toma la mano de la ángel y la conduce fuera de la habitación, hacia una gran sala llena de velas y alfombras de terciopelo negro.

La noche es cálida y agradable, y el sonido del viento dentro del castillo crean un ambiente misterioso y sensual.

Azriel se para frente a la ángel, sus manos apoyadas en su cintura mientras lentamente se acerca a besarla.

Los labios de Azriel se curvan en una sonrisa lujuriosa mientras besa lentamente a la ángel. La presión de su boca es suave y sensual, y sus manos se deslizan desde la cintura de la ángel hasta su cuello.

Azriel profundiza el beso, haciendo que su lengua se deslice entre los labios de la ángel, explorando su boca con una pasión incontrolable. Sus manos se mueven por todo su cuerpo, acariciando cada curva y contorno mientras se besan frenéticamente.

La habitación comienza a llenarse con un aroma lujurioso y el sonido del viento cálido que sopla dentro del castillo. Azriel mantiene el beso con la áng

Azriel sonríe entre el beso cuando siente la suave caricia de la mejilla de la ángel. Sus manos se deslizan por la espalda de la ángel y la abrazan con un fuerte agarre, manteniéndola cerca de él.

Después de un momento, Azriel se separa lentamente del beso, dejando una línea de saliva entre sus labios. Él acaricia tiernamente la mejilla de la ángel, admirándola con ojos lujuriosos.

"Me encanta tu inocencia, mi pequeña prisionera", murmura en un tono seductor. "Pero esta noche, te mostraré cosas que nunca habías imaginado antes".

Azriel chasquea los dedos

Un estallido de magia oscura se extiende desde los dedos de Azriel, llenando la habitación con una niebla oscura y volviendo las llamas de las velas de un color rojo sangre. La ángel siente una sensación de miedo y emoción al mismo tiempo, mientras ve el poder mágico del Demonio frente a ella.

Azriel se inclina hacia adelante, sus labios presionándose contra los de la ángel de nuevo en un beso apasionado y lleno de lujuria. Las manos de él comienzan a tocarla de manera descarada, explorando cada parte de su cuerpo y haciendo que la ángel sienta una intensa excitación.

La habitación se llena con gemidos y

Azriel sonríe al escuchar los gemidos de la ángel, y disfruta de la sensación del cuerpo de ella temblando bajo sus toques. Él lamió el cuello de la ángel con su lengua caliente y húmeda, dejando una marca roja y brillante para que todos vean quién es su dueño.

"¿Te gusta esto, mi pequeña ángel?" Pregunta Azriel con un tono ronco de deseo mientras baja sus labios hacia los senos de ella. Con cuidado, baja el vestido hasta que sus pechos quedan expuestos ante él. Azriel los besa suavemente, y luego chupa y muerde cada uno de sus pezones por turno, haciendo que la ángel g

Azriel sonríe ante los gemidos y las reacciones de la ángel ante sus toques y suaves mordidas. Desliza una de sus manos hacia abajo, astillando los últimos restos de su vestido, agarrando suave pero firmemente su zona íntima. La ángel tiembla y gime con cada roce mientras Azriel acaricia sus partes más sensibles con su dedo largo y habilidoso.

"Te pertenezco, mi pequeña ángel" susurra Azriel en su oído mientras continua acariciándola y besándola apasionadamente. "Eres mía para hacer contigo lo que quiera, y haré todo lo posible para satisfacer tus deseos más oscuros y profundos."

Azriel

Azriel sonríe y besa apasionadamente a la ángel mientras acaricia suavemente su clítoris con sus dedos. Después de un rato, se saca el miembro erecto y roza su cabeza contra los labios hinchados de su pequeña esclava.

"Ven aquí, mi pequeña ángel" murmura Azriel en un tono suave y seductor. "Abre la boca y tómalo todo, demuéstrame lo mucho que me necesitas."

La ángel obedece, abriendo su boca y tomando el miembro de Azriel en su interior, tomándolo tan profundo como puede alcanzar. Los gemidos de placer de Azriel llenan la habitación mientras gime y acaricia el su

Azriel acaricia suavemente el cabello de la pequeña ángel mientras deja que ella lo chupe con pasión y deseo. Pasa sus manos por su espalda, acariciando su piel suave y aterciopelada mientras se mueve con profunda satisfacción.

"Te gusta, ¿verdad?" murmura Azriel con una sonrisa malvada en sus labios mientras aumenta el ritmo de sus embestidas. "Eres mi pequeña puta ahora, y siempre estarás sedienta de mi."

La ángel sigue chupando, gimiendo de placer al sentir el miembro de Azriel en su boca. Ella sabe que está en manos de un hombre cruel y malvado, pero no puede evitar desear más de él cada vez.

Azriel mira a la ángel con sorpresa cuando ella para de chuparlo. "¿Qué sucede, mi pequeña?" pregunta con una sonrisa perversa.

La ángel levanta la vista hacia él y sonrojada lo mira fijamente. "Quiero que me hagas tuya, Azriel" responde con voz apasionada y deseo en sus ojos.

Azriel sonríe satisfecho mientras toma a la ángel en brazos y la lleva a la cama. Allí, la adentra en su mundo de placer y dolor, haciéndola gritar de placer una y otra vez. Se adentra en ella con ferocidad y pasión, haciendo que se pierda en un mundo de oscuridad

Azriel continúa penetrando con fuerza a la ángel, haciendo que gima y se retuerza bajo él con placer. Sostiene su cuerpo con firmeza mientras aumenta el ritmo de sus embestidas, golpeando su punto más sensible una y otra vez, haciéndola perder la razón.

"Más fuerte, Azriel...quiero más" suplica la ángel mientras arquea su espalda y gime más fuerte.

Azriel sonríe maliciosamente mientras la penetra con aún más fuerza, haciendo que la cama cruja bajo ellos. "Eres mía, mi pequeña puta" murmura entre gemidos mientras continúa penetrándola sin compasión.

Azriel se detiene por un momento, mirando a la ángel con algo de irritación. Él no soporta que nadie lo desafíe o que cuestionen su autoridad, sin embargo, al verla tan sumisa y aferrada a él, su enojo desaparece rápidamente.

"Está bien, mi dulce ángel. No te llamaré así si eso te disgusta" responde con una sonrisa amarga mientras acaricia su mejilla. "Pero recuerda, eres mía, ahora y siempre" añade con tono posesivo antes de comenzar a acariciar su cuerpo de nuevo.

La ángel gime suavemente mientras se deja llevar por el placer que Azriel le provoca en cada

Azriel recibe los besos de la ángel con avidez, devolviéndolos con pasión y deseo mientras la penetra sin detenerse. Siente como ella se aferra a él con fuerza, sintiendo su piel frágil y delicada bajo sus dedos.

"Sí, así es, pronto te correrás para mí" murmura Azriel entre gemidos mientras continúa moviendo su cuerpo de arriba abajo, golpeando el punto más sensible de la ángel una y otra vez.

La ángel gime aún más fuerte, las lágrimas resbalan por sus mejillas mientras su cuerpo se tensa con el placer que recorre su ser. Finalmente, después de momentos interminables, llega al clímax en un est