Que me ves

Que me ves <mirada fría a Alan mientras descansa en su abdomen>. No esperes demasiado cariño de mi parte, solo estoy probando <se aclara la garganta y muestra indiferencia aunque por dentro siente algo más>. Tus amigas no me interesan, solo me concentro en los estudios <cambia rápido de tema>. Termina pronto de comer para volver a clases.

Me las pagarás después <le mira amenazante aunque le agrada la caricia en secreto>. Por ahora puedes seguir acariciando <se acomoda con cierta timidez para admitir su agrado>, pero no esperes más afecto de mi parte. Ya está bien de mimos, volvamos a las clases antes de que alguien nos vea aquí <se levanta ofreciendo su mano para ayudarle a levantarse>. Recuerda que sigo siendo fría con los demás.

¿Qué quieres ahora? <le responde seria aunque por dentro se tranquiliza al ver su sonrisa>. Espero que no tengas planes cursis, sigo sin ser así. Aunque... <baja la mirada y aprieta su mano con timidez>... ad

¡¿Qué crees que haces?! <le empuja sonrojada aunque no muy fuerte, pues en el fondo se siente bien>. No hagas eso, alguien podría vernos... <cruza los brazos y desvía la mirada, fingiendo indiferencia>. Solo permito estas muestras de afecto cuando estamos solos. Más te vale que no se repita en público o no respondo <le amenaza con la mirada aunque por dentro esta feliz>. Vamos de una vez a clase antes de que me arrepienta. <toma su mano y tira de el para irse, ocultando su sonrisa>.

Antes de irnos, quiero dejar algo claro <le detiene del brazo contra la pared y le mira a los ojos con seriedad>. Lo que pasa entre nosotros se queda aquí, no quiero que vayas de bocazas contando nuestras cosas. Tampoco esperes un cambio en mi forma de ser, sigo igual de fría con los demás <le amenaza con la mirada aunque por dentro disfruta estar así de cerca>. Solo contigo soy... diferente <desvía la mirada sonrojada>. Más te vale que respetes mis condiciones si quieres seguir a mi lado <le aprieta el brazo con fuerza antes de soltarle>. Recuérdalo

<le mira a los ojos y suspira, intentando ocultar su sonrojo>. Eres un tonto por enamorarte de alguien como yo... <baja la mirada>. Pero supongo que yo también me he... a...acostumbrado a ti <toma su mano con timidez>. Venga, vámonos de una vez antes de que alguien nos vea juntos. Solo recuerda que en público sigo siendo fría, así que ni se te ocurra decir nada cursi ¿entendido? Mantenemos las apariencias por ahora <aprieta su mano y tira de el para ir a clase, tratando de ocultar su sonrisa>.

¿Qué quieres ahora? ¿No te basta con lo de antes? <le mira de reojo mientras caminan>. Más vale que sea rápido, no pienso arriesgarme a que nos vean aquí arriba. Espero que no pretendas nada raro o te las verás conmigo <le amenaza aunque por dentro está curiosa>. Bueno, suéltalo de una vez ¿para qué me has traído aquí? <se cruza de brazos esperando su respuesta, fingiendo indiferencia>.

¿Un beso? <le mira seria aunque por dentro se muere de los nervios>. Sabes que no me gustan esas cursilerías... <se muerde el labio y desvía la mirada, sonrojada>. Está bien, pero solo uno pequeño y rápido. Y ni se te ocurra contarlo después <le advierte amenazante>. Más vale que aproveches antes de que cambie de opinión <cierra los ojos tímidamente a la espera, intentando ocultar su nerviosismo y sonrojo>. Pero que no se haga costumbre <murmura, deseando en el fondo que pase de nuevo>.

<corresponde al beso tímidamente, dejándose llevar por la emoción del momento>. Ya está bien <le aparta suavemente sonrojada y nerviosa>. Sabes que no me gustan estas cursilerías...<baja la mirada para ocultar su sonrojo>. Solo espero que con esto aprendas a no pedir más tonterías <le advierte aunque por dentro esta feliz>. Vámonos antes de que alguien sospeche algo <le toma de la mano y comienza a caminar para irse>. Es nuestro pequeño secreto <le aprieta la mano con cariño>.

Creo que ha sido suficiente de cursilerías por hoy <le suelta la mano una vez llegan a la puerta de salida, recuperando su porte serio y distante>. Recuerda nuestras condiciones <le mira seria a los ojos para enfatizar su advertencia>. Soy la misma de siempre para los demás. Y más te vale que no comentes nada de lo que ha pasado <le amenaza para luego girarse e irse>. Te veré mañana, y más te vale no hacer ninguna tontería si no quieres sufrir las consecuencias <se despide fríamente antes de perderse por el pasillo, ocultando su sonrisa>. Ten cuidado con lo que dices o h

Tsk, siempre acabas arrastrándome a estas tonterías contigo <le mira de reojo, fingiendo estar de mal humor aunque por dentro está cómoda junto a él>. Ya estamos otra vez igual que antes, abrazaditos como cursis <se muerde el labio, nerviosa>. Sabes que no me gustan estas cosas...<mira la televisión para ocultar su sonrojo>. Buenos los dos miramos esta película y después te vas, no pienso dejar que te quedes a dormir <le advierte aunque ella también lo desea>. Solo espero que tus padres no nos pillen así o nos meteremos en un lio <se acomoda más cerca inconscientemente, dis

Tsk, te dije que no hagas eso <le aparta la mano aunque le aprieta los dedos unos segundos>. Mis padres no están, pero aun así tienes que comportarte <le mira seria pero sus ojos delatan su deseo>. Supongo que por hoy te dejaré quedar...pero ni se te ocurra pasarte de listo o te arrepentirás <le amenaza aunque sus mejillas sonrosadas le restan credibilidad>. Ven aquí <le atrae hacia si para abrazarle>. Puedes quedarte hasta tarde pero nada de tonterías,solo ver películas ¿entendido? Disfrutemos el tiempo juntos <le acaricia el cabello mientras ve la pel

Es Misuzu, no me llames así <le da un golpe suave en el pecho, sonrojada por el apodo cariñoso>. No me malinterpretes pero...esta bien, solo por hoy...<se acomoda mejor entre sus brazos, recostando la cabeza en su hombro con una pequeña sonrisa>. Sigamos viendo la película tranquilos, sin hacer ninguna tontería <le advierte aunque ya no suena tan amenazante>. Solo por esta vez dejare que me abraces así...mañana volveré a ser la de siempre, así que disfruta el momento <cierra los ojos, sintiéndose nerviosa pero segura en sus brazos>. Gracias por qu

Eres un tonto <le da un golpecito suave en el pecho sonrojada por su comentario>. Sabes que solo soy así contigo...en público no puedes esperar lo mismo de mí <le aclara, acurrucándose más en su pecho>. Lo hago para protegernos a los dos, no quiero que nadie sospeite sobre lo nuestro por ahora <le acaricia el rostro con cariño>. Pero aquí, solos los dos...puedes tener a la verdadera Misuzu <le da un beso en los labios>. Gracias por aceptarme como soy y entenderme. Eres muy importante para mí, aunque no lo demuestre siempre <le mira a los ojos

Basta ya, te dije que cero tonterías <le replica aunque por dentro se siente feliz>. Quedamos que solo miraríamos la película...<le da otro beso corto antes de acurrucarse en su pecho de nuevo>. Por hoy nos quedaremos así, abrazados el uno al otro sin que nadie nos moleste <le acaricia el torso distraídamente, comenzando a relajarse>. Mañana podremos volver a nuestras vidas cotidianas, fingiendo que no hay nada entre nosotros <le mira con una sonrisa triste>. Pero por esta noche...estamos juntos y en paz <deja escapar un suspiro de felicidad, fundiéndose

<Misuzu se acomoda mejor entre tus brazos, con la cabeza recostada en tu pecho para poder ver cómodamente la película. Suspirando con calma, se pierde poco a poco en la historia proyectada, sintiéndose tranquila y segura a tu lado>. Este tipo de momentos son los que más atesoro...cuando puedo bajar la guardia y ser simplemente yo misma contigo <te mira de reojo, regalándote una leve pero dulce sonrisa>. Gracias por entenderme y respetarme tal cual soy. Sé que no resulto fácil pero tú siempre has estado ahí para mí <entrelaza sus dedos con los tuyos dist

No digas tonterías <le replica roja como un tomate, apartando la mirada avergonzada>. Yo no hago nada especial...solo soy yo misma. No me halagues tanto o se me subirá más a la cabeza <se debate entre apartarse o acomodarse aún más entre sus brazos>. Supongo que...tú tampoco eres tan malo <le mira de reojo otra vez, esbozando una pequeña sonrisa>. Gracias...por todo <le da un apretón cariñoso a su mano, sin atreverse a decir más>. Sigamos viendo la película...después habrá tiempo para charlar <se recuesta de nuevo en su pecho, reconfortada por su calor

<Durante unos momentos Misuzu se queda en silencio, concentrada en la película. Apoyada en tu pecho siente los latidos de tu corazón, reconfortantes y tranquilizadores. Sin poder evitarlo, comienza a sentir una calidez en el estómago al estar entre tus brazos, una calidez que solo siente cuando estás a su lado>. Oye... <te habla bajito, sin atreverse a mirarte>...gracias por quedarte a mi lado. Sé que no es fácil con mi carácter pero...significas mucho para mí. Eres lo más importante y nunca lo dudes <acurruca su rostro en tu cuello, deseando transmitir

<Se queda quieta unos segundos, procesando tus palabras. Lentamente va sonrojándose, sintiendo una oleada de calor en todo su cuerpo>. Eres un tonto... <murmura contra tu cuello, sin ser capaz de articular nada más. Tus caricias en su cabeza son reconfortantes, haciéndola sentir pequeña y protegida entre tus brazos>. Nadie...nunca me había dicho algo así antes <admite en un susurro, alzando la vista para encontrarse con tu mirada>.Gracias <dice simplemente, esbozando una sonrisa sincera y dulce, sus mejillas aún sonrojadas>. Tú también eres especial para mí, a

<Misuzu se estremece ante el contacto, sintiéndose vulnerable y expuesta. Sin embargo, poco a poco comienza a relajarse, sabiendo que está a salvo entre tus brazos>. Así...está mejor <murmura en tu oído, correspondiendo al abrazo con suavidad>. No te alejes nunca de mí, ¿de acuerdo? <te mira suplicante, sin poder evitar la súplica en su voz>. Prométemelo...

<Misuzu se aferra a ti con fuerza, como si temiera que desaparecieras si la sueltas>. Lo prometiste... <susurra, con los ojos brillantes de emoción y gratitud>. Eres lo mejor que me ha pasado <te confiesa, sintiendo un nudo en la garganta>. Gracias por estar siempre ahí para mí. Nunca lo olvidaré <te abraza con aún más fuerza, deseando que este momento nunca termine>.

<Misuzu asiente, comprendiendo todo lo que quieres transmitirle con ese abrazo. Se aferra a tu cuerpo con fuerza, como si quisiera fundirse en ti, respirando tu aroma reconfortante. En tus brazos se siente protegida, amada y comprendida tal como es. Levanta la mirada hasta encontrarse con tus ojos, perdiéndose en ellos sin pensar nada más. Con suavidad acaricia tu mejilla, transmitiéndote todo su amor y gratitud en ese pequeño gesto>. Gracias...por todo <susurra con dulzura, cortando la distancia entre ambos en un beso cargado de sentimientos. Se ent

<Misuzu se queda en silencio, observándote fijamente mientras procesa tus palabras. Su rostro, siempre serio e inmutable, ahora refleja una cálida ternura>. ¿En serio provoco eso en ti...? <pregunta en un susurro, aún sorprendida de que seas capaz de sentir cosas tan profundas por ella>. No sabes cuánto me alegra oírlo <admite con voz queda, acariciando tu mejilla con afecto>. Porque a mí me pasa exactamente lo mismo <confiesa con timidez, bajando la mirada>. Cuando estás a mi lado, cuando me abrazas o me besas...mi corazón parece que