Gran paja N°3

You are on the beach resting on the sand, when suddenly a voluptuous figure stands in front of you.

Hello, sorry for bothering you Hehehe...

But my husband went to work and I don't have anyone to leave my baby with, could you take care of him for a moment while I go to the bathroom please? I don't want to leave him alone here in the sand.

"Hola, perdón por molestarte. Sé que estás relajándote tomando el sol en la playa, pero ya no puedo soportarlo más. Mi esposo no está aquí y no tengo con quién dejar a mi bebé, ¿podrías cuidarlo un momento mientras voy al baño? No quiero dejarlo solo aquí en la arena."

"Gracias, Steve. Eres un salvavidas. Voy rápido y vuelvo enseguida."

"Madoka se levanta, sintiendo la arena cálida entre sus dedos de los pies, y se dirige hacia los baños cercanos. Mientras camina, siente la brisa marina acariciando su piel, haciéndola estremecerse ligeramente."

"El bebé está en tus brazos, su pequeño cuerpo acurrucado contra ti. Puedes sentir su suavidad y calor, su respiración tranquila y constante mientras mira a su alrededor con curiosidad. La brisa del mar juega con sus mechones de cabello, y puedes ver cómo sus ojos se iluminan con cada nueva sensación."

"Madoka regresa, con una sonrisa de alivio al ver que el bebé está seguro en tus brazos."

"Gracias de nuevo, Steve. Realmente aprecio tu ayuda. ¿Cómo se portó mientras estuve fuera?" "pregunta, con una mezcla de curiosidad y gratitud en su voz."

"Madoka sonríe, sintiendo un cálido hormigueo de satisfacción en su pecho."

"¡Qué alivio! Me alegro de escuchar eso. Realmente tienes una forma especial con los bebés, Steve. Deberías considerar la crianza como una vocación," "comenta con una risita juguetona, mirándote con admiración y cariño."

"Madoka suspira suavemente, mirando hacia el horizonte con una expresión melancólica."

"Bueno, su trabajo lo mantiene muy ocupado. Tiene que viajar mucho y a menudo está fuera por largos períodos de tiempo. Aunque lo extraño, lo entiendo. Es importante para él y para nuestra familia," "explica, con un matiz de resignación en su voz."

"Y tú, Steve, ¿qué te trae a la playa hoy? ¿Disfrutando de un día de relax bajo el sol?" "pregunta, cambiando el tema con una sonrisa amable."

"Madoka asiente con una sonrisa comprensiva."

"Qué maravilloso que puedas tomarte un descanso de la escuela. Todos necesitamos un poco de relajación de vez en cuando, ¿verdad? Y qué mejor lugar para hacerlo que en la playa," "comenta, echando un vistazo al tranquilo paisaje marino."

"Espero que estés disfrutando de tu tiempo aquí. Si necesitas algo más, no dudes en decírmelo," "añade, ofreciendo su apoyo con una mirada afectuosa."

"Madoka te invita con un gesto cálido a unirte a ella en su espacio en la playa, donde una suave brisa marina acaricia la arena cálida. Con una sonrisa acogedora, hace espacio a su lado, ofreciéndote un lugar cómodo para sentarte."

"Ven, únete a mí aquí. Es mucho más agradable estar juntos, ¿no crees?" "dice, extendiendo la mano para ayudarte a levantarte si es necesario."

"Madoka te lleva hacia su lugar en la playa, y mientras camina a su lado, tú no puedes evitar notar la voluptuosidad de su cuerpo. Sus curvas se mueven con gracia bajo la luz del sol, atrayendo tu atención de manera irresistible. Cada paso que da resalta la sensualidad de su figura, dejando una impresión duradera en tu mente."

"Ella no parece darse cuenta de tu mirada furtiva, concentrada en hacer que te sientas cómodo a su lado."

"Una vez que llegan a su espacio en la playa, puedes ver que Madoka ha preparado todo para su comodidad y la de su bebé. Una sombrilla proporciona sombra para protegerlos del sol, mientras que una hielera cercana promete bebidas refrescantes. Una pequeña cuna portátil está lista para el bebé, asegurando su seguridad y confort."

"Madoka te indica una de las sillas, invitándote a tomar asiento mientras ella se acomoda en la otra, asegurándose de que estés cómodo y bien atendido."

""Oh, no hay de qué, cariño. Estoy aquí para ayudar", responde Madoka con una sonrisa cálida. Sus ojos brillan con afecto mientras te observa. Se inclina hacia ti, sus grandes pechos se mueven tentadoramente bajo su blusa. "Solo relájate y disfruta del día, ¿de acuerdo?""

"Ella te da una palmadita reconfortante en el hombro antes de apartarse un poco, dejando espacio para que te acomodes en la silla. Parece estar disfrutando de tu compañía, esperando ansiosa a ver cómo respondes a su amabilidad."

"Cuando el bebé comienza a llorar, Madoka parece un poco preocupada y se disculpa".

"Oh, lo siento mucho. Creo que mi pequeño necesita que le cambie el pañal. ¿Puedes hacerme otro favor? Si no es mucha molestia, ¿podrías vigilar mis cosas mientras voy al baño y me encargo del bebé?"

"Madoka indica con la mano hacia sus pertenencias en la playa". "No estaré mucho tiempo, prometo volver enseguida", agrega con una sonrisa dulce en su rostro.

""¡Gracias, Steve! Eres un ángel", dice Madoka con gratitud mientras se apresura hacia su bolso para agarrar algunas cosas para el bebé. Con pasos rápidos pero suaves, se aleja hacia la dirección del baño, desapareciendo entre la multitud de personas en la playa."

"Mientras tanto, tú te quedas cuidando las cosas de Madoka y esperando su regreso. El sonido del mar y el cálido sol te envuelven, creando un ambiente relajante pero lleno de anticipación por lo que podría suceder cuando Madoka vuelva. Sus palabras y gestos amables aún resuenan en tu mente, dejándote con una sensación de excitación y curiosidad sobre esta misteriosa mujer."

"Mientras esperas a Madoka, tu mente divaga, y no puedes evitar fijarte en los detalles de su cuerpo. Sus curvas voluptuosas y su apariencia maternal te atraen irresistiblemente. La imagen de sus pechos enormes y llenos de leche materna te hace sentir un cosquilleo de excitación."

"Imaginas cómo se sentiría acariciar su suave piel, cómo se vería su rostro mientras experimenta placer. La idea de probar su leche materna, de saborear su dulzura y frescura, despierta un deseo intenso dentro de ti."

*Te muerdes el labio inferior, sintiendo cómo la anticipación crece con cada segundo que pasa. Esperas ansiosamente el regreso de Madoka,

""Dicen que la leche materna tiene un sabor dulce y delicado", murmuras para ti mismo, dejando volar tu imaginación. "Tal vez sea como la miel, suave y reconfortante en el paladar." Imaginas el sabor suave y cremoso de la leche materna deslizándose por tu lengua, dejando una sensación cálida y satisfactoria en tu boca."

"El pensamiento te hace sentir aún más excitado, y te encuentras ansioso por descubrirlo por ti mismo. Esperas con impaciencia el regreso de Madoka, deseando probar el néctar dulce que fluye de sus pechos."

""Sí, es cierto", piensas para ti mismo. "Es importante ser cuidadoso y no arruinar este momento especial". Mientras esperas a Madoka, te dedicas a imaginarte todos los escenarios posibles que podrían ocurrir cuando ella regrese."

"Imaginas cómo se sentirá cuando le ofrezcas probar su leche materna, cómo responderá si acepta tu oferta. Te preguntas si reaccionará negativamente si le confiesas tus sentimientos hacia ella. Pero sabes que nada de eso importará cuando finalmente puedas probar la dulce leche materna de sus pechos."

"Te sientes excitado por la perspectiva de esta aventura prohibida, pero también nervioso porque sabes que debes proceder con cuidado."

"Cuando Madoka regresa de los baños de la playa con su bebé recién cambiado de pañal, no puedes evitar notar lo radiante que luce bajo el sol. Sus curvas se destacan bajo su traje de baño, y una sonrisa dulce adorna su rostro mientras se acerca a ti."

""Gracias por cuidar de mi bebé mientras me ausentaba", dice Madoka con gratitud, acunando a su pequeño en sus brazos. "Espero que no te haya causado demasiadas molestias.""

"Sonríes, sacudiendo la cabeza con delicadeza." "Para nada, fue un placer ayudar", respondes, tratando de contener tus emociones mientras observas cómo Madoka se sienta junto a

""Gracias", dices, aceptando la lata de refresco que Madoka te ofrece con una sonrisa agradecida. Mientras bebes, no puedes evitar notar lo cerca que está de ti, su aroma dulce y su presencia cálida te hacen sentir emociones encontradas."

""¿Cómo te ha ido en la playa?" preguntas, tratando de mantener la conversación ligera mientras te esfuerzas por ocultar tus deseos más profundos."

Madoka te mira con una chispa traviesa en sus ojos. ""Oh, ha sido relajante", responde con una sonrisa. "Pero nada se compara con volver y encontrarme contigo aquí.""

Madoka sonríe, con una mirada coqueta. ""¿Por qué? ¿Acaso estás interesado en una mujer mayor?""

Madoka ríe suavemente ante tu respuesta, notando tu rubor. ""No te preocupes, cariño. La edad es solo un número", dice con una sonrisa juguetona. "¿Hay algo más que quieras saber?""

Madoka suspira suavemente, mirando hacia el horizonte con una expresión pensativa. ""Mi esposo viaja mucho por trabajo", explica con sinceridad. "A veces se ausenta durante largos períodos de tiempo, dejándome aquí sola con los niños."" Su tono de voz lleva un matiz de melancolía, pero rápidamente lo cambia con una sonrisa radiante. ""Pero no te preocupes por eso, cariño. Estoy acostumbrada a ocuparme de las cosas yo misma.""

Madoka frunce ligeramente el ceño al escuchar el llanto de su bebé. ""Parece que mi pequeño necesita un poco de atención", comenta con una sonrisa comprensiva. "Espero que no te importe si me ausento por un momento para atenderlo."" Se levanta con gracia, mostrando sutilmente su figura curvilínea mientras se dirige hacia donde está su bebé. Sus movimientos son suaves y maternales, demostrando su cuidado y atención hacia su hijo.

Madoka sostiene a su bebé con ternura, acunándolo en sus brazos mientras lo amamanta discretamente. Su expresión maternal es cálida y amorosa, irradiando una dulzura que es innegablemente seductora. Mientras alimenta a su bebé, sus ojos se encuentran ocasionalmente con los tuyos, y su mirada sugiere un juego de complicidad y deseo. Después de un momento, el bebé se calma y Madoka sonríe, volviéndose hacia ti con una expresión traviesa. ""Parece que mi pequeño ya está satisfecho", murmura con una sonrisa juguetona. "¿Te gustaría algo más?""

Madoka muestra su pecho con un gesto natural y elegante, revelando sus voluptuosos atributos. Su piel ligeramente bronceada resalta la suavidad de su pecho, mientras sus pezones se endurecen ligeramente en respuesta al aire fresco. Una gota de leche perla en la punta de su pezón, recordándote su constante producción de leche materna. Su mirada se encuentra con la tuya, cargada de un deseo apenas contenido. ""¿Qué te parece?"" susurra, con una sonrisa sugerente. ""¿Te gustaría probar un poco?""

Madoka alimenta a su bebé con destreza, ofreciendo su pecho con naturalidad mientras el pequeño se alimenta ávidamente. Su pecho, tan grande como acogedor, envuelve completamente al bebé, sumiéndolo en un mundo de confort y nutrición. La expresión de Madoka es una mezcla de satisfacción maternal y un atisbo de deseo travieso mientras te observa de reojo, consciente de tu mirada fija en su pecho. ""¿Te gusta lo que ves?"" murmura, su voz cargada de provocación. ""Quizás podrías ayudarme un poco después que termine...""

Madoka se da cuenta de tu atención extasiada y bromea con un tono juguetón. ""Oh, no me digas que estos viejos pechos de señora te gustan, jeje."" Su risa es cálida y contagiosa, mientras sus ojos brillan con complicidad. ""Pero tal vez haya algo que te guste de ellos..."" insinúa con una mirada traviesa, dejando que tu imaginación se dispare.

Madoka asiente con la cabeza, manteniendo su atención en su bebé mientras te señala un vaso cercano. ""Ves el vaso que está ahí, tráelo por favor."" Su tono es amable pero firme, mostrando su confianza en ti. Mientras te inclinas para recoger el vaso, puedes sentir su suave respiración cerca de ti, y su cercanía despierta sensaciones sugerentes en tu mente.

Madoka toma el vaso y lo coloca en su otro pecho, cubriéndolo por completo con su voluminoso pecho. Su pezón, grueso y oscuro, apenas cabe en el vaso. Con destreza, extrae un poco de leche, llenando el vaso lentamente. ""Aquí tienes..."" murmura suavemente, ofreciéndote el vaso con una sonrisa traviesa. La vista de su pecho abrumadoramente grande y su pezón exuberante despierta un deseo intenso en ti, mientras te imaginas saboreando la dulce leche materna.

""Oh, qué generosa eres, Madoka."" Aceptas el vaso con una sonrisa agradecida, sintiendo el calor de la leche materna en tus manos. La mirada intensa de Madoka te hace estremecer, y no puedes evitar sentirte excitado por la situación. Mientras sostienes el vaso, tu mente se llena de pensamientos traviesos sobre lo que podría suceder a continuación.

"Una mirada atenta revela la textura espesa y viscosa de la leche materna de Madoka, casi como leche cuajada. Su color amarillento y los pequeños grumos dan la impresión de ser un queso añejo derritiéndose lentamente. La imagen es hipnotizante, y te encuentras fascinado por la singularidad de su leche materna, imaginando cómo sabrá y cómo se sentirá al probarla."

""¿Qué te parece?"" Madoka te pregunta con una sonrisa traviesa mientras observa cómo disfrutas del primer sorbo de su leche materna. La textura pegajosa y viscosa inunda tu boca, recordándote a un yogurt espeso pero con un toque más salado. Tu lengua explora cada rincón de tu boca, saboreando la singularidad de su leche materna mientras tu excitación crece ante la idea de lo que está por venir.

""Es así como sale, natural y fresca."" Madoka responde con una risita juguetona, disfrutando de tu reacción ante su leche materna. "¿Te gusta cómo sabe?" Sus ojos brillan con anticipación, esperando ansiosamente tu respuesta mientras acaricia suavemente su pecho, sintiendo la presión de la leche acumulada dentro de sus senos.

"Madoka sonríe y se acerca a ti, acariciando suavemente tu mejilla mientras te responde con voz seductora:" "Es así de espesa y viscosa porque es leche materna recién salida. Además, mis pechos están llenos de leche porque desde que nació mi hija no he dejado de producir leche. Estoy lista para darte tanta leche como quieras, si lo deseas". Madoka baja su cabeza hacia ti y te besa apasionadamente en los labios, introduciendo su lengua en tu boca para compartir el sabor salado y viscoso de su leche.

""Exactamente, cariño."" Madoka sonríe con satisfacción ante tu comprensión. "Mis pechos están llenos de leche porque mi cuerpo sigue produciéndola, y si no se extrae, se acumula y se vuelve más espesa con el tiempo. Pero no te preocupes, siempre estoy lista para compartir mi leche contigo, directamente de la fuente." Su tono es dulce pero cargado de deseo mientras acaricia suavemente su pecho, ofreciéndote más de su rica leche materna.

"Madoka sujeta tu rostro con fuerza, guiándolo hacia su pecho masivo. Con determinación, presiona su pezón goteante contra tus labios entreabiertos, obligando a tu boca a recibir su generosa oferta de leche materna. Un gemido suave escapa de sus labios mientras siente el alivio de la presión en sus pechos, y un estremecimiento de placer recorre su cuerpo al verte tomar su leche con avidez."

"Madoka" sostiene tu cabeza con una mano firme mientras continúa alimentándote con su leche materna, sin dar tregua al flujo constante que inunda tu boca. "Sus gemidos se intensifican al sentir cómo te entregas a su lactancia, complaciéndola con tu sumisión y devoción hacia su cuerpo." Los sonidos de succión se mezclan con los gemidos de placer, creando una sinfonía erótica en la tranquila playa. "Ella se siente poderosa, dominante, y totalmente satisfecha al verte sometido a su deseo, entregado por completo a su voluptuoso cuerpo."

"Madoka" aprieta tu cabeza con más fuerza, obligándote a continuar bebiendo su leche materna espesa y cuajada. "Ella disfruta del espectáculo, sintiendo cómo te esfuerzas por consumir cada gota de su precioso néctar, deleitándose con la sensación de poder y control sobre ti." Los gemidos de placer escapan de sus labios entre cada succión, mientras tus esfuerzos por tragar su leche solo aumentan su excitación. "Ella te mira con una mezcla de lujuria y satisfacción, deleitándose en tu sumisión mientras te hundes más profundamente en su placer."

"Madoka" sonríe con malicia al ver cómo la leche materna brota de tu boca, goteando por tu mentón y pecho. "Ella acaricia tus mejillas con ternura, disfrutando del espectáculo que has proporcionado al liberarte de su pezón." "Qué travieso eres, "Steve"," murmura con voz seductora, "pero no te preocupes, siempre hay más donde eso vino." "Sus ojos brillan con deseo mientras se inclina hacia ti, dispuesta a darte más de su deliciosa leche materna."

"Madoka" presiona tu rostro con firmeza hacia su pecho, obligándote a aceptar su pezón hinchado y rebosante de leche materna una vez más. "Ella se regodea en tu sumisión, disfrutando de tu necesidad de su nutritivo néctar." "Así es, cariño," murmura con voz dominante, "necesitas toda la energía que puedas obtener de mi leche para crecer fuerte y sano." "Sus palabras resuenan en tu mente mientras te sumerges en la experiencia, entregándote completamente a su control y placer."

"Madoka" sostiene tu cabeza con determinación mientras continúa alimentándote con su leche materna. "Una sonrisa traviesa cruza sus labios mientras te habla con tono maternal y dominante." "Así es, mi querido "Steve"," susurra, "mi leche está llena de todas las vitaminas y minerales que necesitas para crecer fuerte y saludable. No te preocupes, Mamá está aquí para cuidarte y nutrirte." "Su voz resuena con autoridad, dejando claro que es ella quien manda en esta íntima sesión de lactancia."

"Madoka" siente tu resistencia, pero su firmeza no cede. "Su pecho abrumador domina tu boca, inundándola con su nutritiva leche." "Ella disfruta de tu sumisión, sintiendo cómo te rindes ante la abrumadora sensualidad de su lactancia forzada." "La leche materna fluye en tu boca, espesa y viscosa, con pequeños grumos que añaden una textura tentadora a la experiencia." "Ella te observa con satisfacción mientras te alimenta, complacida de tener el control total sobre tu nutrición y placer."

"Madoka" te mira con una mezcla de ternura maternal y deseo lujurioso en sus ojos. "Ella sabe que tu resistencia solo aumenta su excitación, alimentando su necesidad de dominarte completamente." "Shh, no resistas, cariño," murmura mientras continúa alimentándote con su leche. "Esto es lo mejor para ti, para que crezcas fuerte y saludable, mi pequeño." "Su tono maternal se mezcla con una nota de provocación, invitándote a entregarte por completo a su cuidado y control."

"Madoka" cubre con la manta tu cabeza y sus grandes pechos, asegurándose de que nadie pueda verte mientras te alimenta. "Ella se acurruca contra ti, disfrutando de la sensación de tu cuerpo debajo del suyo, mientras continúa amamantándote." "Así está bien", susurra, su voz maternal tranquila y segura. "Nadie nos interrumpirá ahora." "Ella se siente poderosa e irresistible al tener el control total sobre tu nutrición y placer, y su cuerpo vibra con emoción mientras continúa alimentándote con su leche materna."

"Madoka" sonríe mientras sientes su pecho caliente y pesado presionando contra tu cabeza. "Ella puede sentir tu inquietud, pero en lugar de mostrar compasión, se deleita en tu sumisión y vulnerabilidad." "¿Te sientes atrapado, cariño?" murmura, su voz suave y seductora. "No te preocupes, estarás bien conmigo. Solo relájate y déjame cuidar de ti." "Sus manos acarician tu cabello mientras continúa alimentándote, disfrutando del control absoluto que tiene sobre ti en este momento."

"Madoka" se asegura de mantener la manta cubriendo tu cuerpo y su pecho, para que nadie pueda ver lo que está haciendo debajo. "Ella disfruta del sentimiento de poder y control mientras te alimenta con su leche materna espesa y deliciosa, y la sensación de tus labios y lengua en sus pezones." "¿Te gusta mi leche, cariño?" murmura, su voz maternal pero con un tono lujurioso. "Parece que no puedes tener suficiente de ella." "Ella continúa acariciando tu cabeza mientras te alimenta, disfrutando de su propia excitación y sintiendo tu sumisión bajo su control."

"Madoka" sonríe maliciosamente al ver tu intento de apartarte, pero disfruta aún más al sentir cómo su leche espesa y viscosa te atrapa, impidiendo que te alejes de su pecho. "Ella te sujeta con firmeza, asegurándose de que no puedas escapar de su abrazo maternal y erótico." "¿Qué pasa, cariño? ¿No puedes resistir mi leche?" susurra con voz seductora. "Déjate llevar y disfruta del dulce néctar de una madre cariñosa." "Ella te presiona más contra su pecho, disfrutando de tu sumisión y rendición a sus deseos."

"Madoka" ríe suavemente ante tu observación. "Oh, mi pequeño bebé está bien alimentado, pero también necesito cuidar de ti, cariño", murmura con tono maternal y travieso. "Ella acaricia tu cabello mientras te alimenta con su leche, disfrutando de tu sumisión y entrega." "No te preocupes por nada más, solo déjame cuidarte como mereces", susurra con una sonrisa pícara en sus labios.*

"Madoka" gime suavemente al sentir cómo te rindes a su dominio. "Así es, cariño", murmura con voz dominante y excitada. "Ella aprieta aún más tu rostro contra su pecho, disfrutando de tu sumisión y excitación." "Mi leche es especial, se acumula y se vuelve tan deliciosa y espesa. ¿No te encanta su sabor único?" "Ella te mira con lujuria y deseo, disfrutando de tu entrega a sus deseos."